Os dejo un protocolo que me habéis pedido muchísimas veces, está desmenuzado y explicado perfectmente por Alejandro Soriano Valencia, TSID, colaborador del Blog, profesional como la copa de un pino y además una buenísima persona, siempre una suerte contar con él. Vamos…
Hola a todos, es un placer para mí estar de vuelta en este maravilloso blog acompañado
de mi gran colega y amigo Antonio.
En esta ocasión trataremos otro protocolo Doppler, os hablaré del Doppler renal. Es un
protocolo muy fácil de seguir, aunque para seros sinceros será de los más complicado de
realizar, sobre todo las primeras veces que lo hagáis.
Para este estudio tenemos que tener en cuenta:
1. Usaremos transductores de baja frecuencia. Por lo general con unos 4Mh podremos
hacer el estudio sin ningún problema.
2. Será suficiente 1 foco.
3. El paciente lo colocaremos en decúbito supino / decúbito lateral y con los brazos
hacia la cabeza, igual que realizaríamos un protocolo de abdomen.
El orden será el siguiente:
Primero haremos una valoración renal en escala de grises. Tendremos que observar que
ambos riñones mantengan las características ecográficas normales (tamaño renal, buena
diferenciación corticomedular, grosor parenquimatoso conservado, ausencia de masas,
litiasis y dilatación del sistema excretor).


Después estudiaremos el flujo intrarrenal distal (arterias arcuatas). Cuanto más distal
estudiemos estos flujos, mejor aseguraremos que no hay ninguna estenosis arterial.
Tendremos que obtener al menos un flujo de cada tercio del riñón.
Cuanto más estable sean la apneas, más fácil os resultara conseguir un buen flujo, por
tanto os aconsejo que si veis paciente fatigado, que lo dejéis recuperarse y que respire
a su ritmo para que después pueda mantener lo máximo posible dichas apneas.

Una vez hayamos valorado cada tercio del riñón, nos toca estudiar la arteria renal
principal. Siempre que nos sea posible lo haremos lo más próximo a su salida en la
arteria aorta abdominal.
En caso de que no podamos, al menos, debemos sacar su flujo en el hilio renal.
Estos flujos los sacaremos con Doppler pulsado y siempre ayudándonos del Doppler
color.
Por último, tendremos que observar la perfusión renal con Power Doppler.


Los valores que tenemos como referencia son:
• IR entre 0,55 y 0,70.
• Velocidad pico sistólica inferior a 100 cm/seg.
• Índice de aceleración mayor a 3 m/seg.
También tenemos que tener en cuenta, quizás sea más importante que estos valores, que
los flujos que obtenemos sean de baja resistencia con curvas conservada.
Si observamos que la curva se aplana por más que intentamos sacar una y otra vez un
flujo normal, nos tienen que saltar todas las alarmas ya que estamos ante un patrón
tardus-parvus, producido muy seguramente por una estenosis arterial que no estamos
viendo ecográficamente.
Y hasta aquí nuestro protocolo, como ya sabéis toca tener mucha paciencia, pero lo más
importante es que con la práctica cada vez os resultará más sencillo.
Ya no depende de mi…
















